Tanto el suelo como el clima son dos de los elementos fundamentales para conseguir vinos de gran calidad, pero no menos importante es el proceso de vinificación. Tanto es así que, dependiendo de los procedimientos enológicos utilizados en la elaboración, de una buena uva puede salir un mal vino y viceversa .
Como regla general,desde primeros de septiembre y hasta mediados de octubre tiene lugar la vendimia, donde ya comienza la primera selección separando los racimos dañados de los de buena calidad.
En segundo lugar la uva sana se transporta al lagar de la forma menos mas cuidadosa posible, es un momento muy delicado y hay que intentar que la uva sufra lo menos posible.
El paso siguiente seria la descarga y seguidamente el estrujado.En este último paso se rompe por presión el grano y se obtiene un pasta,esta es trasladada a un conjunto de presas, dando inicio el proceso de elaboración del tipo de vino que se desee obtener.
Una etapa común a todo tipo de vinificación, y también esencial es, la fermentación alcohólica.Una vez finalizado el proceso de fermentación alcohólica ya tenemos el vino nuevo, pero pasaran unos cuantos meses hasta que terminen de fermentar los pocos azúcares que puedan quedar tras la fermentación inicial.