Evaluar y definir un vino es un arte. Arte para el cual no todos estamos preparados ya que requiere de una gran sensibilidad.
A simple vista nos fijamos en el olor, en el sabor, pero eso solo ocurre con los principiantes pues los buenos catadores evalúan a traves de muchas sensaciones que a nosotros nos pasan desapercibidas.
Los aspectos fundamentales a tener en cuenta son:
Si hiciéramos una encuesta entre todos los aficionados ocasionales al vino nos daríamos cuenta de que estos estos análisis los hacemos en cada momento que nos llevamos una copa de vino a los labios pero no recapacitamos sobre ellos, sin darnos cuentas de que una buena copa puede producir un gran placer al paladar.